Foglia
afirmó que “con este proyecto pretendemos poner en conocimiento a las
autoridades provinciales acerca de la preocupante situación que vivimos los
casarenses. Este problema viene de larga data y está íntimamente relacionado al
tratamiento de los líquidos residuales que la empresa ABSA realiza con motivo
del funcionamiento de la planta abatidora de arsénico”
El suministro de agua potable por parte de la
empresa Aguas Bonaerenses SA fue históricamente deficitario e irregular en
Carlos Casares, el nivel de arsénico en diversas ocasiones supero con amplitud
lo prescrito por el Código Alimentario Argentino (CCA) que establece 0,01 microgramos por litro.
Además, con este proyecto se requiere la
designación de un ingeniero químico, lo antes posible, que preste funciones en
dicha planta para garantizar el óptimo funcionamiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario